La temporada navideña, llena de celebraciones y encuentros sociales, puede representar un desafío importante para aquellas personas que están en proceso de recuperación de adicciones. Las recaídas en navidad suelen aumentar drásticamente.
Es un momento donde las tentaciones son abundantes y las presiones sociales pueden influir en las decisiones de quienes luchan por mantenerse firmes en su camino hacia la sobriedad.
La navidad, sinónimo de tentación constante
El alcohol, el tabaco, la cocaína y otras adicciones como la compulsión por las compras o el sexo adquieren una connotación diferente en estas fechas.
El simple acto de presenciar un brindis, la apertura de botellas o el consumo de cualquier sustancia que pueda estar relacionada con alguna adicción, puede ser perjudicial para quienes están en el inicio de su proceso de recuperación, e incluso para aquellos que llevan años sin consumir si el entorno a su alrededor se entrega al consumo de manera compulsiva.
Para ayudar a enfrentar las recaídas en navidad, es crucial adoptar estrategias de prevención que brinden apoyo y contención a quienes se encuentran en este proceso.
Consejos para evitar las recaídas en navidad
A continuación, presentamos algunos consejos que pueden marcar la diferencia en la prevención de recaídas durante esta época:
- Crear un entorno tranquilo alejado de tentaciones. En la recuperación, es clave un ambiente tranquilo. Compartir momentos familiares es positivo, evitando los excesos festivos para mantener la estabilidad.
- Control financiero: Evitar que la persona en recuperación disponga de dinero puede ser una medida clave para evitar la adquisición de sustancias. Limitar su acceso a efectivo o tarjetas puede ser útil.
- No todo es aceptable. Durante las navidades, se genera una percepción de que todo está permitido y que los excesos de esta época pueden pasarse por alto. Estos mensajes representan un peligro para las personas en recuperación, quienes podrían tomarlos como una excusa para recaer.
- Mantener un entorno social positivo: Evitar que la persona en recuperación salga con individuos que consuman drogas o alcohol, así como con antiguas amistades ligadas al consumo, puede reducir la tentación.
- Control del entorno doméstico: Mantener el hogar libre de alcohol u otras sustancias que puedan causar cualquier tentación es una medida preventiva importante.
- Acompañamiento constante: Estar presente y brindar apoyo emocional puede marcar la diferencia. Evitar que la persona esté sola durante largos períodos puede disminuir el riesgo de recaída.
- Elección de actividades: Fomentar actividades alternativas y saludables, como paseos, deportes, cine u otras formas de entretenimiento que no impliquen consumo, puede ayudar a desviar la atención de la tentación.
- Comunicación constante: Mantener una comunicación abierta y constante con la persona en recuperación puede ser fundamental para entender sus emociones, pensamientos y necesidades, de modo que podremos prestarle el apoyo que necesite en cada momento.
- Atención a señales de alerta: Estar atentos a señales de debilidad frente a estímulos que puedan provocar el deseo de consumir es esencial. Cambiar de ambiente si es necesario para evitar la tentación.
Evita las recaídas en cualquier época
Estos consejos no solo son aplicables durante la temporada navideña, sino que también pueden ser útiles en cualquier momento del año.
Además, si la persona que está en tratamiento, siente la necesidad y el deseo de consumir, una buena estrategia es volver al centro de adicciones para salvaguardar el progreso conseguido.
En estas festividades, recordemos la importancia de brindar apoyo y comprensión a aquellos que están en proceso de recuperación. Juntos, podemos crear entornos seguros y solidarios que promuevan la salud y el bienestar durante estas celebraciones.
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